Integrantes del Colegio Académico de la UAM: Destitución de David Chacón como Defensor Universitario de la UAM

El Defensor Universitario de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), David Chacón, viola gravemente los derechos humanos de las mujeres. En su desempeño como funcionario público al servicio de la comunidad universitaria de la UAM, omite su deber de salvaguardar los derechos humanos de la víctima, además de participar directamente de la violencia ejercida contra ella .
El Defensor Universitario evidenció el 9 de diciembre, frente al Colegio Académico de la UAM, su conducta omisa y violenta hacia la víctima en un caso de su competencia.
Aunque la comparecencia tenía el propósito de rendir su informe anual de labores, el Defensor David Chacón aprovechó ese foro para desacreditar públicamente
a la víctima e intentar justificar su forma negligente de actuar en el caso.
El Defensor Universitario de la UAM atropelló los derechos humanos de la víctima de violencia de género de la siguiente manera&colon

1. Señaló abiertamente que la violencia de género es un asunto personal que no le compete a la UAM. La violencia de género es un asunto de relevancia pública y debe ser combatido por la sociedad en su conjunto y, en
especial, por las y los servidores públicos, como es el caso de los funcionarios de la UAM. Así lo establecen los tratados internacionales y las leyes nacionales en materia de derechos humanos de las mujeres.

2. Insistió en que la violencia de género no compete a la UAM . Chacón negó abiertamente el deber que la Universidad sí tiene frente a su comunidad para combatir los casos de violencia de género , con independencia de que en otros ámbitos también se deba atender el asunto bajo las normas que correspondan.

3. Evadió su deber de destituir al Defensor Adjunto por violaciones graves a los derechos humanos y a sus funciones. En cambio, sólo pidió la renuncia de Alejandro Monzalvo, evitando con ello que el exservidor público enfrentara la investigación y asumiera la sanción que correspondían conforme a las normas de la institución. Incurrió con ello en corresponsabilidad por los daños causados a la víctima y por el ejercicio indebido de funciones (al impedir que el agresor fuera sancionado conforme a los procedimientos de justicia universitaria).

4. Violó la confidencialidad que debe guardar sobre el caso y, en particular, sobre los datos personales de la víctima. El Defensor Universitario brindó a todo el auditorio el nombre de la víctima, su sede académica , su profesión , su puesto y lugar de trabajo , su relación con el agresor y una serie de detalles sobre la vida personal y laboral de la víctima.

5. Cuestionó públicamente la veracidad del dicho de la víctima frente al auditorio, el Defensor dijo que “no hubo para mí una explicación convincente , toda vez que la señorita es militante, al menos, sé que es miembro de una organización feminista”.

6. El Defensor Universitario puso en riesgo la integridad física y emocional de la víctima. Durante la comparecencia, el funcionario informó que era jefe directo tanto del agresor como de la víctima. Ambos laboraban en el mismo espacio&colon las oficinas de la Defensoría.

7. Dio más importancia a la seguridad de los archivos que a la seguridad de la víctima. El Defensor Universitario no sólo reconoció haber descuidado su deber de salvaguardar la seguridad de la víctima, sino que explica cómo activamente la puso en riesgo , pues su preocupación era la seguridad de los expedientes en manos del defensor adjunto&colon “No le permití, desde luego , al defensor adjunto sacar los expedientes y esa era la razón por la que debía ir”.

8. Acusó a la víctima, públicamente y sin sustento, de intentar desacreditarlo a él, al agresor y a la Defensoría Universitaria de la UAM.

9. En su ponencia parecía sugerir que, como Defensor Universitario, no le correspondía dar crédito al dicho de la víctima ni darle curso a su denuncia , siendo, incluso, irónico al comentar que él no se hace cargo de la denunciante.

10. Confrontó agresiva y directamente a la víctima en público. Se dirigió a la víctima, sentada frente a él en el
auditorio.

11. El Defensor Universitario atiende la violencia de género bajo una lógica de asistencia paternalista que es
Incompatible con la visión de derechos humanos que exige el cargo. No se trata de hacer favores ni de brindar apoyos que obedezcan a la buena voluntad o a la “sensibilidad” del Defensor. Se trata de derechos universitarios y humanos que él, como servidor público y titular de la Defensoría, tiene el deber de respetar, promover y proteger.

12. El Defensor desafió a otras autoridades de cuidarse de calificar como irresponsable su actuación en el caso.
“Si deslindarme de lo que hacen los trabajadores fuera de la Defensoría es un acto de irresponsabilidad, entonces, soy irresponsable , pero creo, creo, estoy convencido, y se los digo a todos, sobre todo los que tienen un cargo –rectores y directores en este salón‐ que, entonces, ustedes también serían responsables de la conducta de sus empleados
fuera de la universidad ”.

Bajo semejante razonamiento, Chacón se deslinda abiertamente de la obligación que las normas en materia de Derechos Humanos le imponen como servidor público&colon atender y combatir los casos de violencia de género que se den entre miembros de su comunidad, con independencia de dónde se hayan cometido.

Es indignante y sorprendente tener que explicarle al Defensor Universitario que los efectos y riesgos de la violencia de género en pareja trascienden las paredes del hogar y que resulta de particular gravedad para la víctima el compartir el espacio de trabajo con el agresor, particularmente después de haberlo denunciado.

Con este funcionario inepto al frente de la Defensoría Universitaria, en la UAM no sólo se revictimizó ampliamente a la denunciante sino que se puso en peligro su vida al obligarla –pues su subsistencia depende de seguir asistiendo al trabajo‐ a compartir el espacio laboral con la persona que la violentó física y emocionalmente y que la amenazó de muerte.

Con base en esto, ¡ Exigimos la inmediata destitución de David Chacón como Defensor Universitario&excl , ya que su persistencia en el cargo atenta directamente contra los derechos humanos de las mujeres de la comunidad universitaria.

Hacemos responsables a David Chacón y Alejandro Monzalvo en caso de que la denunciante sufra alguna vulneración a su integridad física, por haberse atrevido a denunciar.

Red No Están Solas

¡Ninguna agresión se queda sin respuesta&excl

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