Tribunal Federal Electoral del Poder Judicial de la Federación México: Que anulen la elección de diputados federales del 7 de junio de 2015

Obligada la
anulación de las elecciones de los diputados federales: ¡la sociedad civil debe
exigirla!


 

La
integración de la nueva cámara de diputados tiene en estos momentos una gran
trascendencia para el país: muchas legislaciones de gran importancia están
pendientes: la reforma del campo, de la salud, la ley general de aguas, los
ajustes al presupuesto por la baja de ingresos del petróleo y sobre todo, la
legislación electoral que estará vigente en 2018. El estudio de la validez de
las elecciones de los diputados federales del 7 de junio merece por lo tanto
mucha atención. Las elecciones de los diputados federales del 7 de junio son
notoriamente improcedentes debido a:

 

La muy pobre
representatividad de los elegidos a una diputación federal. La muy baja votación
conseguida por los candidatos ganadores de una diputación federal, en
promedio cerca del 11% del padrón electoral de su circunscripción, o muy
probablemente del 7% o aún menos, si se descuenta el voto comprado o
coaccionado, habitual en el PRI, PAN y PRD, los convierte en
representantes espurios y en un peligro para México: en su gran mayoría
son individuos evidentemente incapaces de hacer legislaciones que beneficien
a los mexicanos. Cerca del 67% de los ciudadanos realmente incluidos en el
padrón electoral el 7 de junio ignoraron a los candidatos a la diputación
federal: 62% se abstuvieron y un 5% adicional votaron nulo. El INE
"rasuró" a cerca de 5 millones de votantes, para maquillar la
participación ciudadana. Por la casi nula representatividad de los
diputados federales elegidos el 7 de junio es obligada la anulación de las
elecciones en las que participaron: podemos ser víctimas de más
legislación chatarra de la que ya tenemos.

La evidente parcialidad,
partidismo, ilegitimidad de las autoridades electorales: INE-TEPJF. La manifiesta pasividad de
las autoridades electorales ante la muy ilegal, costosa, prolongada y
engañosa campaña electoral del PVEM que a todas luces exige la cancelación
del registro de este partido de acuerdo con la Ley, y ante la escandalosa
compra de votos y gasto excesivo de campaña del PRI, el PAN y el PRD,
altera radicalmente el resultado de esta elección: es obligada la
anulación de las elecciones de los diputados federales del 7 de junio. En
esta fecha el PVEM consigue 47 diputados por medio de esta abominable
campaña que probablemente tuvo un costo superior a los mil millones de
pesos; estos diputados le permiten al PRI- que tiene 203 diputados- conseguir
la mitad de los votos en la cámara de diputados. El PVEM tiene ahora mayor
influencia que nunca antes en la cámara de diputados y , como siempre, está
al servicio de los mayores contaminadores y saqueadores del gas, el
petróleo, los minerales, los acuíferos de México; este partido es todo lo
contrario de lo que significan en el mundo las palabras: partido, verde,
ecologista y mexicano; desde su fundación es un esperpento al servicio de las
peores causas políticas: es pieza fundamental para la aprobación de las
próximas iniciativas de Peña Nieto. El fortalecimiento de la presencia del
PVEM en la cámara de diputados presagia pésimos acuerdos legislativos, en
especial sobre los asuntos ambientales, patrimoniales, electorales. Los
consejeros del INE y los jueces de TEPJF operan mayoritariamente como si
fueran militantes del PRI. EL PRI, verdadero dueño del control del PVEM,
controla por lo visto a las instituciones electorales mexicanas, lo que hace
que sean totalmente inaceptables las elecciones de diputados federales del
7 de junio.

El gasto excesivo en la
organización de las elecciones de 2015 y en las campañas electorales de
los grandes partidos en estas elecciones. El escandaloso gasto del
INE y del TEPJF en su operación ─una democracia cara no es democracia─ y
el desquiciante gasto en las campañas de los grandes partidos ─más de 30
millones de spots en TV─ rompen totalmente la equidad de las campañas:
hacen ganar a los poderes fácticos: los diputados federales quedan al
servicio de las televisoras y otros intereses económicos. Nada tienen de
democráticas unas elecciones en las que el voto tiene un costo superior a
los novecientos pesos. Es un suicidio aceptar la elección de diputados
federales nacidos de tan descomunal gasto electoral como el de 2015.

La legislación electoral
chatarra vigente que sirve de apoyo a la organización y celebración de las
elecciones de diputados federales del 7 de junio. La legislación electoral
vigente, otra legislación chatarra típica de las legislaturas mexicanas,
acepta votaciones irrisorias, como las que obtuvieron los diputados
federales electos el 7 de junio, como fundamento de la validación legal de
la elección a una diputación federal; también acepta la realización de
gastos multimillonarios en publicidad y promoción de un partido
(PVEM),mucho tiempo antes de las campañas electorales de diputados
federales, así como la descarada compra de voto y los excesivos gastos de
campaña realizadas por los grandes partidos PRI-PAN-PRD en las campañas
electorales para elegir diputados federales. Estos hechos hacen notoriamente
improcedentes estas elecciones: es obligada la anulación de las elecciones
de diputados federales del 7 de junio.

 

Obligada la
anulación de las elecciones de los diputados federales: ¡la sociedad civil debe
exigirla!



Adriana Matalonga,

Miguel Valencia, Edith Gutiérrez, Mauricio Villegas.