Monsanto contraataca con un veneno letal que mata a todas las plantas que encuentra por su camino -- salvo a los transgénicos de Monsanto. ¡Puede incluso viajar por el aire y alcanzar los terrenos vecinos!

Pero en unos días podemos frenarlo.

Después de que 1 000 agricultores afectados realizaran una protesta masiva, un estado clave de EE.UU. podría conseguir prohibir este veneno y sentar un precedente que influyera en las legislaciones de todo el planeta.

Monsanto ha orquestado una potente campaña de presión, una artimaña para limitar la lucha a nivel local. Pero un millón de nosotros firmamos ahora esta petición, se la enviaremos al proceso oficial ¡y demostraremos al mundo entero que queremos a este producto tóxico fuera de nuestros campos de nuestros platos! ¡Suma tu nombre!