Un hombre de 36 años, casado y con una niña de 8, se ha suicidado hoy arrojándose al vacío tras haber perdido su casa en un proceso de desahucio y recibir presiones por parte de Hacienda para pagar una astronómica deuda generada por los trámites. No podemos permitir que los bancos y nuestros gobernantes sigan llevando a los ciudadanos a la desesperación más absoluta. El próximo martes el PP tiene la posibilidad de poner fin a esta barbarie.

La cifras son escalofriantes: 2012 registró meses enteros con más de 500 desahucios diarios, perpetrados en su mayoría por los mismos bancos responsables de la crisis. Así, mientras el gobierno derrocha nuestro dinero rescatando a bancos corruptos, se niega a dar a los ciudadanos una salida digna al drama que supone perder la vivienda. La Plataforma de Afectados por la Hipoteca ha logrado paralizar cientos de desahucios, y acaba de presentar una iniciativa legislativa ante el Congreso proponiendo medidas que podrían devolver la esperanza a miles de familias.

Se nos acaba el tiempo. El PP ha dicho que bloqueará las propuestas este martes, pero con el caso Bárcenas todavía caliente, no se pueden permitir un nuevo batacazo ante la opinión pública. Solo un clamor ciudadano sin precedentes puede lograr que esta sea la última muerte por culpa de los crueles desahucios. ¡Firma esta petición urgente y haz que corra como la pólvora!