Monsanto contamina nuestros campos y nuestros alimentos, rociándolos de glifosato. Bayer produce pesticidas que acaban con las abejas. Y ahora pretenden unirse en una mega compañía de 66 miles de millones de dólares para nada menos que hacerse con el control del mercado mundial de alimentos.

Por suerte, para sellar esta unión necesitan el sí quiero de los reguladores que controlan las leyes sobre competencia en Estados Unidos y Europa. Monsanto y Bayer no pueden permitir que les falle el plan y van a tirar la casa por la ventana para que sus cabilderos convenzan a quien haga falta. La única manera de plantarles cara es utilizar todo nuestro poder ciudadano para hacer algo todavía más potente.

Nuestra comunidad ha vencido a Monsanto dos veces en los últimos meses y ambos reguladores tienen la reputación de velar por los intereses de los ciudadanos. Únete y díselo a todo el mundo -- vamos a llevarles 1 millón de voces para impedir este monstruoso enlace. Firma la petición.