El gobierno de Honduras fue descubierto con las manos en la masa. El Seguro Social podría haberestado vendiendo medicamentos adulterados letales a precio de oro para embolsarse cientos de millones de dólares para la campaña del presidente.

Existe el riesgo de que elcaso quede enterrado, como se ha hecho siempre; pero también puede ser el grano de arroz que incline la balanza para que todo cambie. Depende de nosotros.

Jugar con la vida de las personas es imperdonable - se cree que al menos once hondureñas murieron por utilizar óvulos adulterados con harina. Creyeron que se saldrían con la suya, pero Honduras no tiene miedo. Nunca antes habíamos visto las calles tan llenas de indignación, cientos de miles nos hemos movilizado en todo el país.

No hay tiempo que perder -solamente una investigación independiente puede llegar al fondo de los hechos, pero necesitamos la presión internacional. Esta semana nos reuniremos con la ONU y queremos llevar miles de voces hondureñas exigiendola creación inmediata de una Comisión Internacional Contra la Impunidad en Honduras. Únete y comparte esto con todo el mundo.

Miguel Briceño
Indignado hondureño