La situación en la Amazonía es preocupante.

Una gran parte de la selva amazónica ha sido devastada, tanto, que los científicos afirman que estamos llegando a un punto de no retorno, y sin embargo, los gobiernos continúan acelerando su destrucción.

De modo que lo mejor que podemos hacer en este momento crítico, es apoyar a las personas que llevan siglos protegiendo la Amazonía. 

Las comunidades indígenas no sólo habitan la Amazonía, sino que son parte de ella. Sus modos de vida dependen directamente de la supervivencia de las selvas, y es por esto que la mayor parte de los territorios mejor conservados se encuentran bajo su custodia.

Aún así, es muy frecuente que sus derechos a la tierra sean negados, ignorados, y no reconocidos ante la ley. 

Y aunque lo que las comunidades requieren pueda sonar a burocracia - titulación de tierras, cartografía espacial, reconocimiento legal - esto es absolutamente necesario. Se necesita solidaridad para lograr que el control de la Amazonía regrese a manos indígenas, protegiéndola de gobiernos y corporaciones que buscan destruirla.

Con tu ayuda, las comunidades podrían comprar amplias áreas de selva amazónica, cubrir gastos jurídicos, financiar el mapeo de los terrenos para demostrar sus derechos ancestrales, y respaldar protestas que logren detener la deforestación antes de que sea demasiado tarde.

Lo que le suceda a la Amazonía afectará a cada uno de nosotros, necesita protección urgente. Nadie luchará con más vigor que las comunidades indígenas que allí habitan.

Hemos escuchado la fuerza y determinación en sus voces, y cuentan con nosotros. Por favor, dona ya lo que puedas.